
¿Conoces a Maggy-Nadyne? Ingeniera de formación, esta madre de cuatro hijos es también madre de Béké-Bobo, una empresa dedicada a aliviar el dolor de los niños con su producto innovador: un pequeño oso terapéutico que alivia de forma natural y eficaz todas las dolencias. ¡Hoy te invitamos a conocerla un poquito mejor!
Primero que todo, para aquellos que no la conocen, sepan que Maggy es una mujer dulce y tímida... Más bien del tipo introvertida y discreta. ¡Así que fue con un par de alicates que atacamos esta entrevista! Por suerte, teníamos varios ositos de terapia a mano en caso de que abrirlos fuera doloroso :).
Un día en la vida de Maggy
¡Ser emprendedor no es un trabajo relajante! Y la vida diaria de Maggy-Nadyne es prueba de ello. Pero, aunque Maggy tiene una agenda y una mente muy estructuradas, la hora en la que comienza su día no está regida por el hábito o un despertador, sino que su cuerpo decide a qué hora abre los ojos, ¡y cambia día a día!
Un renacimiento en Europa
Es en pijama y con un café en la mano que Maggy-Nadyne afronta la primera parte de su jornada, que ella llama el bloque "Europa". Es un momento bastante intenso porque, debido a la diferencia horaria, a menudo hay que afrontar toda una serie de emergencias en relación con la sede europea de Béké-Bobo. Porque incluso con un proceso y un equipo bien establecidos, así como un socio logístico in situ que envía todos nuestros pedidos desde su almacén en Francia, el comercio electrónico siempre está lleno de imprevistos que debemos gestionar caso por caso.

Una transición lluviosa hacia América
Una vez solucionados los asuntos europeos, Maggy se dirige a la ducha (sí, ¡aunque a veces ya sean las 10 de la mañana!). Es un momento sagrado, en el que Maggy hace un balance mental de Europa antes de centrarse en Estados Unidos. Luego camina hasta la oficina y aprovecha su caminata de 25 minutos para relajarse escuchando podcasts o audiolibros. Como una esclusa de aire, este pequeño momento de descompresión le viene muy bien y le permite afrontar la segunda fase de su jornada con energía, ¡una ventaja, porque el siguiente bloque de trabajo en la agenda es bastante denso!
Cosas serias antes de las recompensas
Al llegar a la oficina, Maggy se sumerge en todas las tareas relacionadas con la gestión de su negocio: contabilidad, gestión de producción, administración, estrategia, atención de urgencias al cliente y seguimiento de su imagen de marca. A menudo es el momento más estresante de su día, por lo que tiene a mano algunas golosinas para darse un gusto después de su breve descanso para comer acompañado de una caminata a casa.

El placer de terminar el día con buen pie
¿Qué considera Maggy una recompensa? Todas ellas son tareas que estimulan su lado analítico y creativo. Entonces, para complacerse, ¡Maggy puede decidir analizar sus cifras, optimizar la producción o crear nuevos productos! Pero lo que realmente la relaja es cuando puede permitirse parar todo para coser o cortar tela durante una hora... Tanto es así, que a veces la vemos en el taller cuando ha caído la noche, sentada ante su máquina favorita con un podcast en los oídos...
Limpiar la mente: ¿un desafío?
Sí, como muchos emprendedores, Maggy piensa en su negocio las 24 horas del día... ¡O casi! La única manera que tiene de despejarse es subirse a su bicicleta y pedalear, pedalear, pedalear... Así recorre unos 2.000 km al año, ¡sin contar los miles de kilómetros "parados" que hace en su salón en invierno! Pero la buena noticia es que Maggy siempre termina volviendo a casa con sus pequeños cachorros.

Una cosa en común: las piruetas
¿Sabes qué tienen en común la vida de un emprendedor y la vida de una madre? Para Maggy, son las piruetas. ¡Su capacidad de pivotar y su capacidad de mantener un tiempo de reacción muy corto son una gran ayuda para él en el día a día! Por eso también, cuando su hija Camillie llegó al mundo con problemas de salud, no quiso quedarse como espectadora. Ella juntó valor con ambas manos y creó una solución para calmar el dolor de su hijo. Y eso es lo que siempre le permite ser creativa a la hora de cambiar de dirección y afrontar retos. ¡No es casualidad que antes de convertirse en madre y empresaria, Maggy fuera patinadora artística durante muchos años!
Un equipo armonioso
¿Qué mantiene unido al equipo Béké-Bobo? Esto se debe a que a Maggy-Nadyne le gusta rodearse de personas que comparten sus valores. Según ella, es fundamental que los miembros de su equipo tengan puntos en común para que la vida cotidiana sea agradable. Después de todo, ¡dicen que “los pájaros del mismo plumaje vuelan juntos”! Así pues, en Béké-Bobo encontramos personas amigables, más bien introvertidas y muy meticulosas... ¡Una mezcla homogénea, como el emprendedor, que hace una buena pareja!
Los empleados que trabajan en el taller disfrutan de un ambiente de trabajo relajado y tranquilo, tanto que se sienten como en casa y no sienten presión durante todo el día, ¡incluso si trabajan de manera muy eficiente! Además, todos los miembros del equipo viven a 10 km del taller, lo que les permite tener una buena calidad de vida, ya que no pierden tiempo en la carretera ni por la mañana ni por la noche. Algunos incluso trabajan desde casa, para poder disfrutar de una cercanía única con sus hijos y nietos, mientras conservan un trabajo que aman.

Un motivo de gran orgullo
¿Qué es lo que, a pesar de la intensidad, los altibajos, hace que Maggy se despierte cada mañana con una sonrisa y una motivación renovada para afrontar un nuevo día? Es saber que en todo el mundo los niños se sienten tranquilizados y los padres aliviados gracias a su invento. Sí, saber que sus pequeños ositos de terapia están siendo adoptados por nuevas familias en todo el mundo le calienta el corazón y la impulsa a querer hacer más, y mejor, cada día.